viernes, 29 de julio de 2022

Finales que merecen una historia

 



Me encantaría que estos relatos fueran terapéuticos y os ayudaran con alguna emoción estancada. Desearía que os sintierais acompañados, cuidados y queridos en cada página. Todos los personajes pertenecen a mi mundo. Son personas amarillas. [...]


Así presentaba su libro Albert Espinosa cuando lo publicó. La edición original es un libro cuidado y mimado y mimoso, está lleno de preciosos carteles que presentan cada cuento (él mismo hacía referencia a esto en sus presentaciomes), han elegido un papel excelente para reproducir estas imágenes y ara que puedas leer, releer y releer sin miedo a gastar rápido sus páginas. Es mimoso porque está lleno de color y el tamaño de su fuente es perfecto para todas las edades y trabajos; cuando estás todo el día leyendo en el ordenador, quieres abrazar a quien decidión imprimir letra un pelín más grande, mantiene los márgenes clásicos para que puedas anotar y descansar la vista, y a quienes cosen el lomo para que puedas abrirlo y manejarlo sin miedo. Se nota que ha sido mimado y es mimoos porque está bien corregido y bien presentado, así solo tienes que preocuparte de disfrutar del texto.

Y, claro, esto no se hace por un texto que no merece la pena. Sin hacer grandes aspavientos, usando un lenguaje claro y comprensible, pero nada oral, el autor ha desarrollado 20 historias cotidianas en apariencia que podrían funcionar como germen de las nuvas fábulas del siglo XXI. Es difícil resumir un libro de cuentos sin contar ninguno (y no lo voy a hecer), simplemente os diré que trata temas como la futura normalización del suicidio o comparar el crecimiento con una mutación.


Una lectura recomedable para poder avanzar y reflexionar.